sábado, 6 de julio de 2013

La situación de la Iglesia católica en España / María José Tarancón *

Me gustaría puntualizar cómo se financia la Iglesia católica española: en el año 2011, la Iglesia recibió 247 millones de euros recaudados de la casilla del IRPF de los contribuyentes que voluntariamente optaron por esta opción en su declaración de la renta. Hacienda lo único que realiza es la labor de recaudador.

Este importe único que recibió la Iglesia del Estado español lo distribuyo entre las 69 diócesis que existen en España y, juntamente con los donativos que se reciben de las parroquias, hacen posible tanto su sostenimiento como todas las labores de solidaridad que la misma realiza, como por ejemplo:

• 5.141 centros de enseñanza; 990.774 alumnos (ahorran al Estado 3 millones de euros por centro al año).
• 107 hospitales (ahorran al Estado 50 millones de euros por hospital al año).
• 1.004 centros, entre ambulatorios, dispensarios, asilos, centros de minusválidos, de transeúntes y de enfermos terminales de SIDA; un total de 51.312 camas (Ahorran al Estado 4 millones de euros por centro al año).
• Gasto de Cáritas al año: 155 millones de euros.
• Gasto de Manos Unidas: 43 millones de euros.
• Gasto de las Obras Misionales Pontificias (Domund): 21 millones de euros.
• 365 Centros de reeducación para marginados sociales: ex-prostitutas, ex-presidiarios y ex-toxicómanos. 53.140 personas. Ahorran al Estado, medio millón de euros por centro.
• 937 orfanatos; 10.835 niños abandonados. Ahorran al Estado 100.000 euros por centro.
• El 80 % del gasto de conservación y mantenimiento del Patrimonio histórico-artístico. (Se ha calculado un ahorro aproximado al Estado de entre 32.000 y 36.000 millones de euros al año).

Todas estas partidas suponen para la economía española un ahorro global anual aproximado de: 68.200 millones de euros.

En otros países, como por ejemplo Alemania, por el mero hecho de estar bautizado, ya seas católico o protestante, debes aportar a tu Iglesia el 9% (en Baviera el 8%) de lo que ingresas a Hacienda, de manera obligatoria, salvo que expresamente renuncies a tu fe, mediante una declaración de apostasía.

Considero que existe mucha mas libertad en España para la financiación de la Iglesia católica, donde voluntariamente el contribuyente decide donde quiere colaborar sin ningún tipo de obligatoriedad.

(*) Economista y abogada

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