CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Francisco ha pedido a los obispos de
Mexico que defiendan "la familia" y "la vida" frente a la "cultura
deshumanizadora de la muerte", durante una audiencia en la Sala
Clementina del Vaticano a toda la Conferencia del Episcopado Mexicano
con motivo de la visita ad limina Apostolorum.
Así, Francisco les ha llamado a "intensificar la pastoral de
familia" para que "se convierta en promotora de la cultura del respeto a
la vida en todas sus fases, desde su concepción hasta su ocaso natural"
al tiempo que la ha definido como la "célula básica de la sociedad" y
"un medio privilegiado para que el tesoro de la fe pase de padres a
hijos".
El Pontífice ha recordado que la celebración del Bicentenario de
la Independencia de México y del Centenario de la Revolución Mexicana
constituye "una ocasión propicia para unir esfuerzos en favor de la paz
social y de una convivencia justa, libre y democrática".
En esta línea, ha lamentado "las múltiples violencias que afligen a
la sociedad mexicana" particularmente a "los jóvenes" y ha llamado a
promover la "concordia" a través de la cultura del "encuentro, del
diálogo y de la paz".
El Papa ha precisado que a los sacerdotes "no les compete aportar
soluciones técnicas o adoptar medidas políticas, que sobrepasan el
ámbito pastoral" pero ha reconocido la "íntima conexión" que existe
entre "el anuncio del Evangelio y la búsqueda del bien de los demás" que
a su vez "coopera a dar credibilidad a la Iglesia y relevancia a la voz
de sus pastores".
También ha indicado que en este contexto "la tarea de los fieles
laicos es insustituible" y que están llamados a "transformar el mundo
según Cristo".
"La misión de la Iglesia no puede prescindir de laicos, que,
sacando fuerzas de la Palabra de Dios, de los sacramentos y de la
oración, vivan la fe en el corazón de la familia, de la escuela, de la
empresa, del movimiento popular, del sindicato, del partido y aun del
gobierno, dando testimonio de la alegría del Evangelio. Les invito a que
promuevan su responsabilidad secular y les ofrezcan una adecuada
capacitación para hacer visible la dimensión pública de la fe", ha
afirmado.
El Papa ha puesto de manifiesto que la Doctrina social de la
Iglesia es un "valioso instrumento" que puede ayudar a los cristianos en
su diario "afán por edificar un mundo más justo y solidario".
"De esta
forma también se superarán las dificultades que surgen en la transmisión
generacional de la fe cristiana", ha comentado.
Francisco ha señalado que es necesario que los jóvenes "cuenten
con catequistas apasionados por Cristo", que sean capaces de cultivar
una "fe sincera, libre y gozosa en los niños y en los jóvenes" y ha
destacado "la importancia que tiene la parroquia para vivir la fe con
coherencia y sin complejos en la sociedad actual".
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