CIUDAD DEL VATICANO.- Benedicto XVI ha admitido que sus "fuerzas físicas" están sufriendo "un lento declive" que "interiormente" le está provocando una "peregrinación" hacia lo que denomina "la Casa".
En
una carta remitida al periódico italiano 'Corriere della Sera', el Papa
emérito ha asegurado: "Me ha conmovido que tantos lectores de su
periódico deseen saber cómo transcurro este último periodo de mi vida.
Solo puedo decir a este respecto que en el lento declive de las fuerzas físicas, interiormente estoy en peregrinación hacia la Casa".
También ha hecho referencia a las personas que cada día lo asisten y lo acompañan. "Es una gracia estar rodeado de un amor y bondad que nunca hubiera podido imaginar en esta última parte del camino, a veces un poco agotador", ha afirmado.
Finalmente ha asegurado sus oraciones hacia los lectores del periódico: "En este sentido, considero la pregunta de sus lectores parte del acompañamiento en el camino. Por esto, no puedo hacer otra cosa que asegurar de mi parte mis oraciones".
Benedicto XVI cumplió 90 años el pasado 16 de abril de 2017, que celebró con una fiesta bávara en la que no faltaron las jarras de cerveza local en el jardín del monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano, donde reside desde que renunciara al pontificado en febrero de 2013. En aquella ocasión, se le pudo ver sentado junto al primer ministro bávaro, Horst Seehofer y sosteniendo una gran jarra de cerveza de su tierra natal.
También ha hecho referencia a las personas que cada día lo asisten y lo acompañan. "Es una gracia estar rodeado de un amor y bondad que nunca hubiera podido imaginar en esta última parte del camino, a veces un poco agotador", ha afirmado.
Finalmente ha asegurado sus oraciones hacia los lectores del periódico: "En este sentido, considero la pregunta de sus lectores parte del acompañamiento en el camino. Por esto, no puedo hacer otra cosa que asegurar de mi parte mis oraciones".
Benedicto XVI cumplió 90 años el pasado 16 de abril de 2017, que celebró con una fiesta bávara en la que no faltaron las jarras de cerveza local en el jardín del monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano, donde reside desde que renunciara al pontificado en febrero de 2013. En aquella ocasión, se le pudo ver sentado junto al primer ministro bávaro, Horst Seehofer y sosteniendo una gran jarra de cerveza de su tierra natal.
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